
La representante de Cambio Radical denunció amenazas del ELN, acusó falta de resultados y señaló traición a los ideales democráticos
En medio de la instalación del nuevo periodo legislativo, un hecho inusual marcó la jornada: el presidente Gustavo Petro se retiró abruptamente del Congreso mientras la representante Lina María Garrido ejercía su derecho de réplica, en el marco del Estatuto de la Oposición.
Durante más de dos horas, Petro presentó su balance de gobierno, con un discurso centrado en avances sociales, reformas estructurales y críticas al Congreso. Sin embargo, fue la intervención de Garrido —congresista por Arauca, elegida con 10.534 votos y quien confesó haber votado por Petro— la que desató incomodidad visible en el Ejecutivo.
“Este gobierno abandonó a Arauca”
La congresista criticó fuertemente la gestión del Gobierno Petro en materia de seguridad, afirmando que el país se volvió más violento y que el Estado dejó de proteger a las regiones golpeadas por el conflicto.
Denunció públicamente que ha recibido amenazas del ELN y disidencias de las Farc, y cuestionó el silencio del Gobierno ante estos hechos. “Yo no tengo escoltas como ustedes, yo tengo miedo y tengo dignidad”, dijo visiblemente afectada.
“Petro traicionó al feminismo y a la democracia”
Garrido fue más allá al señalar que el gobierno del cambio ha sido un fraude, traicionando los principios democráticos, éticos y feministas que prometió defender. Criticó duramente a varios funcionarios del gabinete y mencionó escándalos de corrupción que han sacudido al petrismo.
“El presidente que prometía justicia social, hoy se esconde de las víctimas, se rodea de investigados y abandona los territorios que juró defender”, afirmó.
Petro se fue antes de terminar las réplicas
Frente a estas palabras, el presidente decidió abandonar el recinto antes de que terminara el turno de la oposición. Aunque desde la Casa de Nariño no se ha entregado explicación oficial, varios congresistas y analistas vieron el gesto como una falta de respeto institucional y una señal de intolerancia política.
Petro se retiró justo antes de que interviniera el último vocero opositor, lo que fue interpretado como un desaire al derecho de réplica establecido por ley.
¿Nuevo liderazgo en la oposición?
Con su intervención, Lina María Garrido se proyecta como una nueva figura de peso en la oposición, capaz de interpelar al Gobierno con argumentos, vehemencia y legitimidad. Su discurso, aplaudido por varios sectores, también generó solidaridad en redes sociales ante las amenazas que ha recibido.
En contraste, la salida de Petro reavivó el debate sobre su disposición a la crítica y su relación con el Congreso en esta última legislatura, clave para el futuro de sus reformas.